Ella, una elegante bailarina de danza española; él, un joven bailarín que nunca había recibido formación acedémica. Hablamos de Raquel y Ginés, una pareja que ha sabido superar la inexpericencia profesional de él y el fuerte carácter de ella para, tras muchos altibajos (sobre todo en su relación personal), llegar a lo más alto de Fama ¡a bailar!.El murciano y la riojana se llevaron anoche, entre ovaciones y aplausos del público (evidentemente de acuerdo con la decisión del jurado), el premio a la mejor pareja de la segunda edición del programa. Era la primera final del concurso, la final de parejas, y todo parecía preparado para la victoria de estas dos jóvenes promesas de la danza.Poco antes de empezar la gala, los familiares y amigos de ambos ya los animaban con vehemencia, Los padres de Raquel lucían camisetas y banderitas con el rostro de su ídolo, su hija. Mientras, el padre y la madre de Ginés respondían a los vítores del público besándose apasionadamente, casi como dos adolescentes.Cuando cualquiera de los dos populares concursantes salía al escenario, las gradas se volvían todo pasión y griterío.Su coreografía lírica, al compás del tema Vivo por ella de Andrea Bocelli y Marta Sánchez, puso la piel de gallina a los miles de seguidores que atestaban la madrileña Cubierta de Leganés.
Esa magnífica actuación, en la que Raquel casi parecía levitar en brazos de su compañero, fue la guinda que completó el pastel de la victoria, un dulce que otras tres parejas (Sergi y Eva, Eli y Erik, y Yure y Miguel) estuvieron a punto de paladear. Ellos seis, junto a Raquel y Ginés, lucharán en la final del miércoles por ganar el premio a mejor bailarín individual. Un poquito, no mucho, más lejos de la gloria quedaron la extraña aunque explosiva combinación de Ariadna y Omar y el poder funky de Nito y Marisa, las dos parejas que quedaron eliminadas a las puertas de la selección final.
Pero en la noche hubo mucho más que furor por Raquel y Ginés. Erik, Sergi o Yure también consiguieron levantar algunos de los mayores revuelos entre el público, y todos, sin excepción, brillaron en coreografías grupales como las inspiradas en los musicales Chicago y Hairspray.
Rafa Méndez puso la energy y los momentos más hot; Sergio Alcover y Álex Guitérrez, el rollito street; Pau Vázquez, la candidez y la dulzura; Marbelys, la elegancia y la plasticidad de movimientos; y Lola y Víctor Ullate, su experiencia en el mundo del baile. En la segunda final, todos volverán a subirse al escenario para cerrar una puerta de Fama y abrir otra que hermanará a las dos generaciones del concurso.
http://www.20minutos.es/
Esa magnífica actuación, en la que Raquel casi parecía levitar en brazos de su compañero, fue la guinda que completó el pastel de la victoria, un dulce que otras tres parejas (Sergi y Eva, Eli y Erik, y Yure y Miguel) estuvieron a punto de paladear. Ellos seis, junto a Raquel y Ginés, lucharán en la final del miércoles por ganar el premio a mejor bailarín individual. Un poquito, no mucho, más lejos de la gloria quedaron la extraña aunque explosiva combinación de Ariadna y Omar y el poder funky de Nito y Marisa, las dos parejas que quedaron eliminadas a las puertas de la selección final.
Pero en la noche hubo mucho más que furor por Raquel y Ginés. Erik, Sergi o Yure también consiguieron levantar algunos de los mayores revuelos entre el público, y todos, sin excepción, brillaron en coreografías grupales como las inspiradas en los musicales Chicago y Hairspray.
Rafa Méndez puso la energy y los momentos más hot; Sergio Alcover y Álex Guitérrez, el rollito street; Pau Vázquez, la candidez y la dulzura; Marbelys, la elegancia y la plasticidad de movimientos; y Lola y Víctor Ullate, su experiencia en el mundo del baile. En la segunda final, todos volverán a subirse al escenario para cerrar una puerta de Fama y abrir otra que hermanará a las dos generaciones del concurso.
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